Las medidas contra la violencia de género parecen dar frutos, si se tiene en cuenta que las denuncias por este motivo mantienen una tendencia a la baja desde el 2005. Hasta entonces, las campañas de información habían conseguido que cada vez se denunciara más la violencia contra las mujeres, aunque hasta la salida de la nueva ley formaba parte de los delitos de malos tratos, cuya casuística es más amplia. En éstos, el agresor puede ser tanto varón o mujer, cónyuge, padre o hijo, aunque que la mayoría seguía el estereotipo de varón-agresor y mujer-víctima.

Según los datos referidos a 2005 y 2006, se registra una bajada del 8,4% al reducirse el número de denuncias de 1.321 a 1.210 en Extremadura, siendo este porcentaje de un 2,8% en la provincia de Badajoz, donde bajaron de 872 a 853.

Hasta entonces, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado contabilizaban denuncias de malos tratos en general, la inmensa mayoría de varones contra mujeres; pero ahora se cuentan solo las de violencia de género, y de este tipo, entre enero y mayo pasados, se han contabilizado 358 denuncias en la región, de las que alrededor de un 70%, unas 250 corresponden a Badajoz.

DIFERENCIAS Esta cifra es sensiblemente inferior a las del mismo periodo de años anteriores, pero hay que tener en cuenta que aquellos recogen también malos tratos y violencia doméstica. No obstante, la reducción de casi el 50% no se achaca solo a esa causa, por lo que se piensa que ha habido una reducción real del número de denuncias.

Por otra parte, mientras las denuncias bajan, las órdenes de protección aumentaron de 778 a 934 en el 2006, para caer a 145 de enero a mayo, algo más de la mitad en Badajoz; y las detenciones, de 774 a 851, para caer a 175, con casi 100 en Badajoz.

Estos datos se conocieron con motivo de unas jornadas para la Guardia Civil de Jerez y Badajoz con competencia en esta materia; en otros encuentros se hará con miembros de la policía.

El curso lo impartió la coordinadora de la Unidad contra la Violencia sobre la Mujer de Badajoz, quien explicó el contenido de la unidad, cómo se organizan y cuáles son sus funciones.

También para informar de aspectos de la nueva ley referidos a la tutela penal y la institucional, los derechos de las víctimas y cómo actuar con ellas para que reciban un trato adecuado, y todo ello con especial consideración de las mujeres inmigrantes.

Uno de los primeros contenidos que explicó Ortega fue la diferencia entre vIolencia doméstica y de género. Las jornadas se iniciaron la semana pasada y continuarán en el futuro en otras localidades "para tratar del fenómeno tan grave de la violencia de género".

Más adelante se celebrarán en otras poblaciones donde haya compañías de la Guardia Civil reuniendo a los miembros de todos los puestos de la zona, y en las que haya comisaría de policía de toda la región.

Los guardias civiles fueron informados sobre el protocolo de actuación que deben seguir en cada caso, en coordinación con los órganos judiciales, con una guía de trabajo diario; "también les hablamos de los derechos de las mujeres víctimas de violencia de género; el tratamiento especial de las inmigrantes y todo los que les pueda afectar a ellos en el tratamiento de las víctimas".

Milagrosa Ortega manifestó, a tenor de los datos, que "afortunadamente, en Extremadura y en Badajoz no tenemos casos graves; hay muy pocos en relación con otras provincias y otras ciudades, y me refiero al desenlace fatal, pero la violencia de género nos afecta a todos".

De hecho, dijo, las denuncias están ahí, con 36.000 órdenes de protección solicitadas el año pasado, de las que se concedieron 27.000--en España--; y eso significa que la mujer no calla más y desde el momento en que denuncia se puede poner en marcha todos los mecanismos de atención, protección y asistencia".