Antonio Benegas, hostelero, propietario del bar El Parque, no daba crédito ayer al ver arder su casa por segunda vez. Más tranquilo al saber que sus cuatro hijos de 3, 6, 16 y 18 años pudieron salir a tiempo, aguardó nervioso a que los bomberos sofocaran el incendio que arrasó su casa en dos horas, el quinto A del número 20 de Carolina Coronado, que da a Luis de Camoes.

Cuando los bomberos recibieron la llamada, hacia las once de la mañana, el jefe, Fernando Bermejo, y una motobomba que estaban a 50 metros del lugar en ese momento acudieron de inmediato y se procedió a desalojar las 15 viviendas del edificio. Enseguida llegaron dos vehículos más, ambulancias del 112 y Cruz Roja y la policía local y nacional, que acordonaron la zona y cortaron el tráfico en dirección a la estación de trenes.

A pesar de lo aparatoso del incendio, no hubo heridos. El 112 solo atendió a una mujer embarazada por su estado nervioso. Incluso un perro chow chow que se hallaba en la casa, salió ileso. El animal, según testigos, saltó de un balcón a otro para huir del del fuego y más tarde los bomberos intentaron sacarlo, pero su agitación le llevó a morder a uno de ellos, sin causarle daño. Le pusieron agua y se avisó al Servicio de Recogida de Animales, que acudió y con un rifle le inyectaron un calmante. Lo sacaron dormido y en buen estado.

Durante las dos horas que trabajaron los bomberos, que encontraron dificultades por la intensidad de la combustión, fueron llegando conocidos y amigos de los afectados, a los que acogieron sus familias. Antonio Benegas explicó que "el año pasado salió ardiendo por el aire acondicionado". Esta vez los bomberos aún no han determinado el origen del incendio, aunque sí ubicaron el foco entre los dormitorios y el salón, según Bermejo.

Un vecino, José Luis González, contó que "estaba dormido y me desperté por el olor a quemado". Se vistió, pudo grabar con su móvil algunas escenas y "después subieron los bomberos a mi terraza; pero no echan agua".

Bermejo explicó tras el incendio que "cuando llegamos el fuego estaba muy avanzado, había tres personas dentro que han salido sin problemas, había mucho humo y ha habido problemas por las temperaturas elevadas, ha costado mucho llegar al foco principal, pero se ha podido controlar bien", tanto en el interior como en el exterior.

Los daños, según el jefe de los bomberos, "han sido importantes, pero sólo en esa casa, ninguna otra ha resultado afectada". También afirmó que los "los hijos de los afectados salían por las escaleras cuando entrábamos, dicen que estaban dormidos y no se han dado cuenta de lo que lo ha ocasionado y nos nos han podido dar más información".