Agentes de la Brigada de Policía Judicial de Badajoz ha desarticulado una red organizada de tráfico de dogas con conexiones con carteles colombianos y turcos que pretendía establecerse en Badajoz para distribuir sustancias estupefacientes en Extremadura y posiblemente en Portugal.En esta operación, denominada Opio, se han detenido a diez personas, --cuatro extremeñas y seis andaluzas--, de las que nueve se encuentran en prisión y una en libertad con cargos.La policía ha incautado 1,2 kilos de cocaína, 9 kilos de hachís y algo más de 3 kilos de heroína, cuyo valor se aproxima al millón de euros.Durante la operación, que se inició hace cinco meses y se ha desarrollado en tres fases, se han realizado tres registros domiciliarios en viviendas situadas en La Cañada, Los Colorines y la Urbanización Guadiana, todas ellas en la capital pacense.El jefe superior de la Policía Nacional de Extremadura, Ángel Galán, aseguró hoy que esta operación es "la más importante que se ha desarrollado en Extremadura en la última década".