La matriculación en las autoescuelas se ha reducido un 60% en toda España, según José Miguel Báez, presidente de la Conferencia Nacional de Autoescuelas. "La situación alarmante se viene sucediendo desde principios de año, pero lo peor está por llegar, con la llegada del invierno", asegura. La crisis ha provocado el descenso de matriculación y el abandono temporal por parte de los alumnos inscritos en las autoescuelas.

Paralelamente se ha producido el aumento de suspensos en las pruebas teóricas y prácticas. La gente pretende obtener el permiso en el menor tiempo posible, alrededor de un mes, con el objetivo de reducir gastos. Pero se produce el efecto contrario: los gastos por renovación de tasas superan considerablemente a los gastos de clases prácticas.

El descenso de alumnos afecta directamente al personal de la propia empresa. Por primera vez se han registrado datos empresariales negativos en la historia de las autoescuelas. "Nunca hubo paro, siempre se necesitó a gente que ocupara los puestos de profesor, y hoy día hay un 25% de personal de las autoescuelas que han ido al paro", explica Rafael Muñoz, presidente de la Asociación Regional de Autoescuelas.

Hasta el año pasado existía un déficit de profesores de autoescuelas, y se preparó a gente para ocupar esos puestos vacantes, incluso vino personal de Portugal para desempeñar esos puestos de trabajo.

Hoy las plantillas en las autoescuelas se han reducido considerablemente y al mismo tiempo las jornadas de trabajo. Los precios de las autoescuelas se mantienen inalterable desde el año 2000 y las empresas sufren agravios mayores al coste. "Este año los precios bajan más que el año pasado, se cobran las clases bajo mínimos. No existe rendimiento alguno", comenta Emilia Gómez, presidenta de la Asociación Provincial de Autoescuelas de Badajoz.