La historia vuelve a repetirse, aunque la Policía Nacional sigue sin confirmar lo que está ocurriendo en la ciudad desde hace varias semanas. Ayer se produjeron cuatro robos en pisos (además de otros tres intentos), que fueron desvalijados tras forzar la puerta de entrada a las viviendas. Ocurrieron en pisos de dos bloques (el 3 y el 30) de la avenida Sinforiano Madroñero y en otro edificio de una calle perpendicular a Carolina Coronado. Hace tres semanas sucedió en otras ocho viviendas y siempre, tras revolverlo todo, se llevan joyas y dinero en metálico, ni ordenadores ni electrodomésticos.

En todos los casos, el modus operandi es el mismo. Los ladrones actuaron por la mañana, entre las nueve y las dos, cuando no suele haber nadie en algunos domicilios. Llamaron al telefonillo y se decidieron por aquellos en los que no contestó nadie. En todas las puertas colocaron pequeñas pegatinas en las mirillas para evitar que los viesen los moradores. Según el cerrajero que acudió a cuatro de los robos de ayer, Francisco Venegas, de Cerrapid, quitan el escudo de la cerradura y también el bombillo para introducir un destornillador con el que abrir la puerta.