La Guardia Civil detuvo a E. F. A., portuguesa de 33 años, vecina de Badajoz, como presunta autora de la compra telefónica por valor de 2.700 euros utilizando el nombre de otra mujer, por lo que ha sido acusada de estafa y usurpación de estado civil. La denuncia la formuló una vecina de Sagrajas ante la Guardia Civil, cuando una financiera quiso cobrarle una compra de colchones y otros objetos, que se había hecho por teléfono el mes anterior. La investigación permitió averiguar el destino de la compra y que la mujer contrató un teléfono móvil a nombre de la víctima. Se recuperaron los efectos.