La Guardia Civil ha detenido a un repartidor de alimentación, vecino de Badajoz y de 30 años, acusado de simular que le habían robado 900 euros de la recaudación y de interponer una denuncia falsa por estos hechos.

El pasado martes, la Guardia Civil tuvo conocimiento del presunto atraco con violencia que había sufrido un repartidor de una empresa de venta de frutos secos y snack en la carretera de Olivenza a Cheles, a quien habían robado el dinero tras rociarle la cara con spray. Los agentes acudieron al lugar de los hechos y comprobaron que en el lugar estaba el camión, pero la supuesta víctima había ido al Infanta Cristina a someterse a un reconocimiento médico. Tras inspeccionar y registrar el vehículo, encontraron oculta en el asiento del conductor su cartera con los 900 euros que presuntamente le habían sustraído.

Horas más tarde, el repartidor presentó una denuncia, pero por las contradicciones en su declaración y tras recuperar el dinero, se le detuvo por querer presuntamente apoderarse del dinero simulando un atraco y engañar a su empresa interponiendo una denuncia.