La Guardia Civil detuvo el pasado martes a C. M. F., de 58 años y vecino de Talavera la Real, acusado de un delito contra la salud pública, al comprobar que tenía en su casa cannabis sativa. Los agentes sospecharon que tenía una plantación ilegal. Tras las investigaciones oportunas, llevaron a cabo un registro por orden judicial y hallaron tres ejemplares plantadas en el patio y otras tres secas, que entre todas arrojaron un peso de 1.758 gramos, susceptibles de convertirse en 5.274 dosis de hachís en el mercado ilícito.