Pese al éxito que tiene la feria de día en el casco antiguo, los pacenses han acudido este año masivamente al ferial a mediodía, donde las casetas que sirven comidas están registrando lleno total desde que comenzó San Juan, según confirmaron sus propietarios.

Ayer era difícil hacer una reserva para comer en el ferial y para hoy no había mesa libre, al menos a partir de las 14.30 horas. Los días laborales se están llenando con grupos de empresas, compañeros que quedan después de salir del trabajo para comer en un ambiente de feria, mientras que el fin de semana son familias, grupos de amigos y visitantes de otras localidades, los que acuden a este espacio para degustar cocido, paella, gazpacho, caldereta o productos ibéricos, los platos más típicos.

En La Granja El Cruce se están "doblando mesas", según Gustavo Gómez, el encargado de esta caseta, que es ya veterana en esto de servir comidas en el ferial. "Esperan a que la gente se levante de una mesa para ocuparla, para el viernes por hoy es imposible reservar", señaló.

UN MILLAR DE HUEVOS Las chuletitas de chivo fritas, la caldereta de cordero, las ancas de rana o el queso de La Codosera, conforman la principal oferta de La Granja El Cruce, además de sus conocidos huevos duros, que pone a disposición de sus clientes como tapa gratuita. "Estamos sirviendo unos 1.000 huevos duros diarios y servimos entre 180 y 190 comidas cada día", según Gustavo, quien aseguró que "el ferial a mediodía cada año va mejor porque han mejorado las infraestructuras y las condiciones de las casetas".

En la caseta municipal la impresión es la misma. Aquí se sirve comida a 500 personas al día y ayer estaba todo reservado, también para el resto de los días que quedan de feria, según el encargado, Blas Hernández.

MAS CASETAS En la caseta de Mayores también había ayer casi un centenar de personas comiendo, la mayoría de los centros de mayores. Otra caseta que se ha animado este año por primera vez a ofrecer menús ha sido La Voltereta. También ha ampliado el espacio y ha estrenado un patio decorado al estilo de un cortijo andaluz, con todo tipo de detalles. Su propietario, Manuel Moreno animó al resto de las casetas a ofrecer comidas. También desde la municipal se pedía a los hosteleros de la ciudad "a ser valientes y montar casetas en el ferial".

Muchos de los hosteleros desisten al considerar excesivas las exigencias de Sanidad, que obliga a tener agua caliente, fregaderos industriales de acero inoxidable con dos senos, lavavajillas industrial, extractor de humos, aparatos para mosquitos, entre otros requisitos.

Sin embargo, los encargados de las que ayer estaban abiertas y repletas de público comiendo confían en que el próximo año, con la construcción de nuevas casetas fijas comprometidas por el ayuntamiento, "el ambiente será todavía mejor porque el público notará muchas mejoras y los hosteleros se animarán a equipar cocinas y confeccionar menús", señalaron.