Un dispositivo integrado por agentes de la policía local, nacional y guardias civiles se encarga desde anoche, como ya hicieron el fin de semana pasado, de vigilar la zona de los bares de la Urbanización Guadiana, para evitar que se produzcan incidentes, de los que se vienen quejando los vecinos de los alrededores, según informaron ayer la Delegación del Gobierno y el portavoz del equipo municipal, José Antonio Monago. En el caso de la policía local, a la operación se suman agentes en prácticas de la Academia de Seguridad Pública, ocho en total.

Este dispositivo se ha montado a raíz de las quejas hechas públicas por la asociación de vecinos, por los últimos incidentes ocurridos en esta zona de la ciudad.

La Delegación del Gobierno especificó que la fin principal de los agentes es garantizar que los establecimientos cumplan el horario de cierre y evitar alteraciones en el orden público a altas horas de la madrugada. El fin de semana pasado, sólo un establecimiento fue denunciado por cerrar más tarde de la hora permitida, que es hasta las tres de la madrugada, y media hora más para que los clientes salgan del local.

CONTROLES DE ALCOHOL Del mismo modo, la Guardia Civil se encarga de realizar controles de alcoholemia a los conductores "y se actuará con contundencia contra todos aquellos que incumplan la normativa vigente", según defiende la Delegación a través de un comunicado.

En este sentido, Monago señaló que el fin de semana pasado pudo comprobarse que la mayoría de los conductores que salen de la zona son mujeres y, salvo alguna situación puntual, en todos los controles, no rebasaron la tasa de alcoholemia permitida. "En muchos casos entran siendo hombres y salen mujeres", bromeó el concejal, para explicar que los que acuden a estos bares son responsables y si luego beben, el que conduce es el que no ha tomado alcohol. Monago apuntó que los agentes actúan también en otras zonas de la ciudad.

LA FUENTE Por otro lado, dio cuenta de los acuerdos adoptados por la Comisión de Gobierno del Ayuntamiento de Badajoz, en relación a los daños provocados al patrimonio urbano, por valor de 8.000 euros. La partida mayor es de 5.300 euros para reparar la fuente de la plaza de Isabel de Portugal, donde se introdujo hace dos semanas un coche, cuyo conductor dio positivo en la prueba de alcoholemia.

Además, Linea 4 editará 11.600 ejemplares de una publicación infantil sobre patrimonio histórico de la ciudad, con un coste de 29.700 euros, dentro del Plan de Dinamización.