En el PSOE dicen que no es el momento de hablar de candidatos a la alcaldía, mientras que en el PP Miguel Celdrán sorprende con el anuncio inesperado de que volverá a presentarse en las próximas elecciones municipales.

Teniendo en cuenta que la fecha de los comicios es igual para todos ellos, y también las aspiraciones, la conclusión es que en los partidos no se trata de marcar ritmos, sino estrategias. A los socialistas no les interesa en estos momentos movilizar a su candidato, mientras que a los populares pacenses --al menos a un sector-- les tranquiliza saber que tienen claro quién es su líder.

Miguel Celdrán ha sorprendido a los suyos, y a los otros, con su anuncio, ya que reiteradamente había expresado su desgana por continuar en este cargo, tal como se ha puesto de manifiesto los últimos tiempos, en los distintos actos públicos a los que el alcalde asiste, y donde Celdrán ya no es el mismo, ni tiene la misma ilusión que cuando empezaba hace nueve años, ni hace ocho, ni hace uno.

Lo de Celdrán ha sido una estrategia para calmar a los suyos, después de los malos resultados en la agrupación local en la elección de compromisarios para uno de los dos candidatos al Congreso Regional. Celdrán ha querido marcar el ritmo, por si alguien desafina.