El traslado del botellón del paseo Fluvial lejos del río es una de las reivindicaciones en las que coinciden Adenex, Salvar al Guadiana y Ecologistas en Acción como paso previo a la recuperación del embarcadero y su entorno como lugar de ocio y cultura para los ciudadanos de Badajoz.

Gran parte de la suciedad que generan estas multitudinarias concentraciones juveniles cada fin de semana acaba en el cauce y la orilla del Guadiana, perjudicando la imagen de este entorno natural y dañando la "rica" fauna y flora del río. "Hay cristales, plásticos y todo tipo de vertidos. En nuestros recorrido por esa zona hemos recogido hasta carritos de la compra y contenedores que se habían tirado al agua. Es una verdadera pena", lamenta José Ramos, presidente de Salvar al Guadiana.

Para Antonio Gentil, director técnico de Adenex, que el botellón se celebre junto al Guadiana es "una asignatura pendiente" que, a su juicio, tienen en primer lugar las instituciones, pero también la ciudadanía. "Es un entorno privilegiado, pero la situación del embarcadero es lamentable y para solucionarlo habría que invertir. La apuesta debe ser institucional, pero los ciudadanos también son responsables de que se siga vertiendo basura al río", expone.

El coordinador local de Ecologistas en Acción, Luis Sanabria, recuerda que en la última convocatoria de sus Premios Atila , el colectivo castigó a los botelloneros con el galardón a la Actuación más bárbara por dejar las zonas por las que pasan "como un vertedero". También Sanabria echa en falta el apoyo institucional al río, "que tiene que ser un lugar de encuentro porque la ciudad vive a su alrededor".

Los ecologistas abogan porque se devuelva "la sombra" al paseo Fluvial con la siembra de árboles acordes con la vegetación de ribera y que se acerque a los ciudadanos al río "con un programa de actos que se desarrolle a lo largo de todo el año", apunta el director técnico de Adenex. En opinión de los ecologistas, la margen izquierda del río debería contar con un aula de naturaleza en la que, con carácter gratuito, se explicase a los visitantes la fauna y flora que habita en el Guadiana, a través de paneles informativos, pero también de educadores ambientales.

En este sentido, Gentil destacó la importancia de generar empleo en este campo "para que los vigilantes del río no fuesen solo fuerzas represivas, sino que además eduquen".

Desde Adenex y Ecologistas en Acción también hicieron hincapié en la riqueza ornitológica del Guadiana y lamentaron que no exista un observatorio ornitológico permanente para que los visitantes conozcan " las aves que viven en el río o las que están de paso".

Las tres organizaciones ecologistas apuestan porque el embarcadero y su entorno se conviertan además en un espacio de esparcimiento a través de actividades de ocio relacionadas con el agua, respetando siempre las épocas de cría de las distintas especies, así como en un referente cultural acogiendo actividades que organizan las instituciones o los colectivos ciudadanos.