El edificio previsto en el proyecto de tratamiento del viejo campo del Vivero albergará locales comerciales en el bajo, una sede de asociación de vecinos en la primera y "quizá algunas viviendas, pero pocas", según aclaró ayer el alcalde de Badajoz, Miguel Celdrán, al ser preguntado sobre el futuro de este espacio.
La asociación de vecinos de San Fernando y Santa Isabel había expresado el malestar de los residentes en esa zona porque el ayuntamiento previera un bloque de viviendas de cuatro plantas, al aceptar las 2.500 alegaciones presentadas al Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para mantener el viejo Vivero como zona deportiva para la margen derecha. El vecindario quiere que todo el espacio sea de uso deportivo.
Celdrán afirmó ayer que los técnicos diseñaron tres posibilidades, entre ellas la elegida, para atender la petición de los vecinos, "y queda todo como zona deportiva, excepto un pico que linda con la urbanización Guadiana, que llevará un edificio de dos o tres plantas". Señaló también que se ampliará el vial que hay a un lateral para que tenga doble sentido, que se harán viales nuevos rodeando el campo, por lo que el edificio "quedará muy bonito visto desde la calle".
Asimismo, parece que habrá que derribar parte de las tribunas laterales y que el actual muro será tirado para levantar una tapia traslúcida, estética y acorde con el entorno.
