Los vecinos del Campillo que se ven afectados por los planes de rehabilitación del Ayuntamiento de Badajoz serán escuchados y atendidos en función de sus necesidades, de manera que la expropiación de sus propiedades será el último recurso. Es lo que dijo ayer el concejal de Urbanismo, Celestino Rodolfo, que salió al paso de todas las informaciones que han surgido las últimas semanas sobre las consecuencias de este proyecto. "Es absolutamente falso --recalcó-- que los vecinos no tengan información y el que no se informa es porque no quiere, pues la oficina del Area de Rehabilitación Integral está abierta permanentemente, donde no deja de ir gente", subrayó, al mismo tiempo que tachó de "infundio" que alguien pueda afirmar que "el ayuntamiento está engañando".

El responsable de Urbanismo lanzó un mensaje de tranquilidad a los afectados: "que no se preocupen que aquí nadie se va a quedar colgado", aseguró. Comentó que en este entorno hay muchas viviendas desocupadas, que el problema es que cada vecino y cada familia "tiene un tratamiento específico" y advirtió de que "nadie se va a hacer millonario a costa de eso, ni los propietarios, ni el ayuntamiento", sino "que se hará lo justo en cada caso concreto".

Así, mencionó que las soluciones que se están dando son muy variadas: en algunos casos se están adquiriendo viviendas, pero también habrá permutas e incluso en los acuerdos de permutas durante el tiempo de construcción se facilitarán los realojos. Reconoció que la expropiación se contempla como una opción, porque así lo permite el Plan General Municipal, pero al mismo tiempo matizó que "lucharemos para que eso sea el último recurso, aunque si es necesario lo haremos, siguiendo los cauces legales".

Aclaró además que las viviendas que se construyan serán de protección oficial de régimen general y habrá una veintena de inmuebles que se derribarán y después no se construirá, porque son espacios destinados a dotacionales públicos.

CORPULENTO El concejal reconoció por tanto que se trata de una "actuación muy compleja", pues hay propietarios que no viven en sus casas, viviendas cuyos dueños no se encuentran y familias que no tienen las herencias en regla. Aseguró que han visitado "casa por casa" y, como anécdota, desveló que dada la especial situación tan marginal de este espacio el Casco Histórico, han tenido que destinar a esta labor a un técnico con un físico muy corpulento.

Rodolfo explicó que en la actuación en El Campillo están involucrados los servicio de Coordinación y Gestión Urbanística, de Gabinete de Proyectos, la oficina del Area de Rehabilitación Integral (ARI), la Inmobiliaria Municipal y el servicio de Vías y Obras. En esta labor "lenta y compleja" llevan más de año y medio y durante este tiempo, los responsables de todos estos servicios se han estado reuniendo todas las semanas.

El concejal recordó que el ayuntamiento ha conseguido 5 millones de euros de subvencioens para toda la actuación prevista, donde se incluyen las demoliciones y los realojos y puso sobre la mesa que la rehabilitación de esta zona tan degradada de la ciudad es una antigua aspiración. Por eso, le sorprende que ahora que se ha "encauzado" se hayan producido reacciones que cuestionan los objetivos. "Si haces porque haces y si no haces, porque no haces", se lamentó.