Braulio Ramos prefiere que sean los ciudadanos quienes valoren el proyecto cuando se acerquen a disfrutarlo.

--¿Alguna dificultad especial, o lo difícil será mantenerlo?

--La dificultad estaba en que es una zona de gran riqueza arqueológica y hay que trabajar con sumo cuidado, no se podía profundizar con las máquinas más de 15 centímetros. Se ha hecho con arreglo al proyecto, y creo que se ha ejecutado correctamente. Ahora, en efecto, viene el problema, que lo mantengamos entre todos y lo respetemos. Puede ser una obra emblemática para Badajoz.

--Pero, ¿ustedes se encargarán de mantenerlo?

--Tenemos un compromiso para mantenerlo durante 18 meses una vez terminadas las plantaciones. Repondremos las plantas dañadas o que mueran, pero no por el vandalismo; aquí viene mucho drogata y para eso el ayuntamiento tendrá que poner su vigilancia.