Maestro de profesión, la gran vocación de Antonio Manzano es Badajoz, su pasado y su futuro.

¿Qué hay que hacer para ser amigo de Badajoz?

--Badajoz tiene muchos amigos, lo que ocurre es que en los últimos decenios lo hemos demostrado poco, porque la ciudad ha estado abandonada a su suerte, sobre todo el casco histórico. Para nosotros ser amigo de Badajoz es preocuparse por Badajoz y demostrarlo.

¿Tiene muchos amigos esta ciudad?

--Sí y se notan mucho más ahora. Cualquier actividad que se hace en la parte antigua atrae a mucha gente, porque quiere recuperar sus raíces.

¿Y enemigos?

--Algunos.

¿De dentro o de fuera?

--Extrañamente quien más daño ha hecho a Badajoz han sido los ayuntamientos y también decisiones de otras administraciones, como la Junta, con la reforma del puente Viejo, por ejemplo. Siempre decimos que los ayuntamientos han hecho más daño a la ciudad que todos los ejércitos que la han sitiado durante siglos.

Badajoz no es sólo el casco antiguo.

--Pero la ciudad es como un hospital y la UCI está aquí.