El hombre acusado de torturar a dos cachorros en Badajoz el 19 de octubre de 2009, de los que uno de ellos falleció a causa de las heridas causadas, y el otro, llamado Fito, sobrevivió con "secuelas" físicas y psicológicas, será juzgado el jueves en la capital pacense.

El juicio tendrá lugar a las 9 de la mañana en el Juzgado de lo Penal número 2 de Badajoz, en el que se han personado como acusación particular la Asociación en Defensa de los Animales (ADANA) de Badajoz, la Junta de Extremadura y la Asociación Justicia Animal.

En su escrito de acusación, la asociación ADANA pide para el acusado, que responde a las iniciales N.B.B., dos años y seis meses de prisión por el "delito continuado de maltrato de animales domésticos", así como la inhabilitación para la tenencia de animales, y la retirada de la custodia del perro que actualmente posee.

Por su parte, la Junta de Extremadura, que también se ha personado como acusación particular, solicita un año y seis meses de prisión para el acusado, y la condena en costas, mientras que la Asociación Justicia Animal respalda el escrito de acusación presentado por ADANA, y hace suyas las peticiones de condena de dos años y medio de cárcel.

El Ministerio Fiscal reclama para el acusado una pena de 10 meses de prisión, ya que establece una "atenuante por su enfermedad psiquiátrica", y pide que el acusado sea sometido a tratamiento externo psiquiátrico por un tiempo equivalente al de la condena. También pide que este hombre indemnice a Adana por los gastos generados y costas.

El abogado de ADANA, Agustín Mansilla Zambrano, explica que el asunto se inició cuando esta asociación presentó una denuncia ante la Policía Nacional, en octubre de 2009, tras la aparición de dos cachorros en un contenedor de basuras de la calle Antonio Ayuso de Badajoz, maltratados con "extraordinaria crueldad y desmesurado ensañamiento", a los que produjo "graves lesiones" que provocaron la muerte a uno de ellos.

Tras esta denuncia, el Juzgado de Instrucción número 2 de Badajoz se hizo cargo del asunto, que se archivó provisionalmente porque no se identificó al autor de los hechos, sin embargo ADANA recurrió el auto de archivo y solicitó más diligencias de investigación. Este recurso fue desestimado y se procedió al archivo provisional.

Sin embargo, recuerda Agustín Mansilla, cuando en noviembre de 2010 aparece en internet un video con imágenes de la "atroz tortura y crimen de un cachorro", ADANA denuncia este hecho ante el Seprona de la Guardia Civil, al que le facilita también la documentación sobre el caso de los dos cachorros torturados en Badajoz.

Y es que en principio, se barajó la opción de que el denominado 'asesino Knino', autor de la tortura del cachorro que se colgó en Internet, y el de los dos cachorros en Badajoz fueran la misma persona, debido a la "similitud" de ambos casos, pero posteriormente se descartó esta posibilidad, según se desprende de la investigación del Seprona, explica el abogado de la acusación.

Tras meses de investigación, el Seprona llega hasta N.B.B., que fue detenido en marzo de 2011 como presunto autor de la tortura de estos dos cachorros en la capital pacense. Tras pasar a disposición judicial, fue puesto en libertad con cargos, a la espera de ser juzgado este jueves.

Según recoge el escrito de acusación presentado por Agustín Mansilla Zambrano en nombre de ADANA, los dos cachorros, que tenían pocos días de vida, presentaban "cortes en las extremidades, la lengua y los labios, amputación de la cola y parte de las orejas y aplastamiento de costillas", lo que produjo "hemorragias internas" a uno de los cachorros, que murió poco después.

Vecinos que transitaban por esta calle fueron alertados por los "lamentos y gritos agónicos de los cachorros brutalmente maltratados, torturados y mutilados", por lo que decidieron llamar a la Policía Nacional y abrir la caja en la que estaban los dos cachorros.

Explica este escrito, recogido por Europa Press, que en su declaración ante los agentes del Seprona y ante el Juzgado de Instrucción, el acusado reconoció "expresamente" estos "macabros hechos", e incluso reconoció que "maltrató a otro cachorro, que había retirado de la perrera provincial de Olivenza, y al que le provocó la muerte de una patata".

Añade la acusación que este individuo, "casi todas las semanas durante meses" acudía a esta instalación para sacar cachorros, según reconoció tanto el propio detenido como el empleado de la perrera.

"Hablamos de decenas de cachorros de los que desconocemos cuál fue su destino, y que probablemente fuera el mismo que el de los cachorros que fueron encontrados, y el que reconoce haber ocasionado la muerte de una patada", explica Agustín Mansilla.

Por todo ello, Adana reclama en su escrito de acusación la condena de este hombre a la pena de un año y seis meses de prisión por la tortura a los dos cachorros, así como otro año de prisión por la muerte del cachorro retirado de la perrera provincial de Olivenza. Son dos delitos de maltrato de animal doméstico "previstos y penados en el artículo 337 del Código Penal".

Pide además la inhabilitación para la realización de profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales durante seis años, y para la tenencia de cualquier animal.

También reclama del acusado una indemnización a Adana de 3.175,22 euros correspondientes a las facturas de la clínica veterinaria en la que fueron atendidos los dos cachorros encontrados en el contenedor, y el tratamiento que siguió el animal que sobrevivió, 'Fito', hasta que se recuperó de las heridas ocasionadas por el maltrato.