Un empleado del aparcamiento subterráneo de la plaza de Santa María, anexo al Museo de la Ciudad Luis de Morales, apareció muerto la noche del miércoles en su puesto de trabajo, en la cabina de cobro del párking. Fuentes consultadas por este diario confirmaron que la muerte le sobrevino por un infarto y aunque los servicios médicos de urgencia que acudieron al lugar intentaron reanimarlo, no lo consiguieron, confirmando su fallecimiento.

El trabajador tenía 57 años y para poder atenderle hubo que forzar la entrada de la cabina, que estaba cerrada por dentro. Los hechos ocurrieron pasadas las once de la noche.

En el lugar se personaron agentes de la Policía Local y de la Policía Nacional.