TEtxtremadura es una de las regiones con mayor porcentaje de mujeres emprendedoras. Ahora se ha sabido que, en Badajoz, el 56% de las nuevas empresas creadas han sido fundadas por mujeres. No conozco la estadística nacional, pero estoy seguro de que ese porcentaje supera la media española. Entre estas mujeres pacenses emprendedoras, la prensa ha fijado la atención en Almudena Larios y Claudia Osorio , que han puesto en marcha en Badajoz un gabinete de análisis de finanzas y asesoría. Ellas son la punta de lanza de millares de mujeres de toda Extremadura, que llevan mucho tiempo al frente de sus empresas o que están constituyéndolas últimamente y cada vez más.
Una cuestión como ésta abre nuevos caminos al futuro de una región como la nuestra. Sólo las sociedades donde las mujeres tengan un papel relevante en el mundo de la empresa y del liderazgo económico, cultural, social y político, avanzarán de manera firme y equilibrada en su desarrollo. Hasta ahora, el progreso de la humanidad ha estado cojo, porque sólo ha contado con la mitad de las personas, los hombres. Verdaderamente, la historia no es más que la crónica del desperdicio de la otra mitad, las mujeres. Por eso el resultado es tan negativo.
Dicen los demógrafos que en nuestro planeta han vivido ya alrededor de cien mil millones de seres humanos. Esto quiere decir que la mitad de la población histórica, es decir, casi cincuenta mil millones de mujeres, no han contado para nada en las grandes decisiones y muy poco en las pequeñas. Es decir, la humanidad ha desaprovechado el talento y la creatividad de aproximadamente setenta y cinco millones de toneladas de materia gris, si aceptamos que el cerebro humano tiene un peso medio de mil quinientos gramos. Cincuenta mil millones de cerebros desperdiciados por el machismo hasta ahora dominante. El malgasto ha sido monumental y catastrófico, porque el desequilibrio provocado por esa ausencia ha conducido a la humanidad a la situación atroz en la que nos encontramos.
Extremadura muestra signos alentadores de que ese escenario está cambiando profundamente aquí. El mérito es de extreordinarias como Claudia y Almudena.
