De momento es una propuesta. El presidente de la Agencia Extremeña de la Vivienda, Javier Corominas, llevará al Consejo de Gobierno una iniciativa para que las casas coloradas que construyó la Junta de Extremadura en la plaza Alta se destinen a jóvenes en régimen de alquiler y que sea una empresa privada la que se encargue de su gestión.

El motivo de acudir a una entidad privada es, según Corominas, que cuando la Administración tiene que sacar a un inquilino de una vivienda pública nunca se va voluntariamente y tiene que acudir al desahucio, situación que se complica en campaña electoral o por otros motivos.

Corominas puntualizó que la intención de la agencia es que estos apartamentos sean ocupados "inmediatamente", a un precio "asequible". La obra está terminada y la propia constructora se está encargando de la vigilancia. A través de un Programa Joven, estos pisos se pondrán en alquiler por un tiempo limitado "y buscando situaciones, que no sean viviendas sociales, que permitan la recuperación de este barrio". Para actuar con este criterio, los ocupantes de estos pisos serán "personas que puedan ayudar a la normalización del entorno de la plaza Alta".