Tres pequeñas fábricas, construidas junto a la escuela de Ingeniería Agraria, recrearán los procesos productivos para la elaboración de productos cárnicos, lácteos y de conservas vegetales. La construcción de las plantas piloto, a través de fondos Feder, ha supuesto un coste de 550.000 euros, ocupan cerca de 800 metros cuadrados y están ubicadas frente al edificio Tierra de Barros perteneciente a la escuela.

Según informa la Uex en su revista 4-Campus y recoge Europa Press, estos tres módulos, de los que se beneficiarán unos 800 alumnos de esta escuela, permitirán no interferir en el trabajo de las empresas en las que, hasta ahora, se venían desarrollando las prácticas de estudiantes. De esta forma, tres titulaciones (Ingeniero Agrónomo, licenciado en Ciencia y Tecnología de los Alimentos e Ingeniero Técnico Agrícola) contarán con instalaciones donde formarse y aplicar su investigación.

DARAN CLASES En estas plantas se impartirán asignaturas como Tecnología Alimentaria, Operaciones básicas de la industria bromatológica, Industria de las conservas vegetales e Industria de las conservas cárnicas.

El director de la escuela de Ingeniería Agraria, José Miguel Coleto, subraya la capacidad adquirida por la universidad, con estos nuevos edificios, para impartir docencia de calidad, a la vez que concurrir en mejores condiciones a convocatorias de proyectos europeos. La finalidad del proyecto es la de crear pequeñas fábricas, sin el volumen productivo de éstas, pero con idéntico objetivo, explica Coleto.

Su orientación estará ligada a los principales sectores de Extremadura, como son los productos cárnicos, con especial dedicación al cerdo ibérico, elaboración de queso y mantequilla, y también de conservas vegetales, procedentes de comarcas como las Vegas del Guadiana y los Valles del Jerte o de la Vera.