Agentes de la Policía Nacional adscritos a la Brigada Provincial de la Policía Judicial de Badajoz han detenido a un hombre de 43 años que estafó a la propietaria del bar Los Sauces, situado en la calle Vicente Delgado Algaba de la barriada María Auxiliadora, haciéndose pasar por inspector de Sanidad de la Junta de Extremadura.

Este establecimiento fue visitado por el detenido entre el 20 de septiembre y el 20 de octubre en tres ocasiones, cobrando a la propietaria distintas cantidades en concepto de tasas por inspección. Antes de irse, después de cada visita, tomaba varias consumiciones que nunca abonaba. También acudió dos veces más a pedir dinero "para su uso personal", según la propietaria de Los Sauces, Sandra Panadero. "Una vez me pidió que le dejara 20 euros para comprar comida porque el cajero le había dejado retenida la tarjeta y en otra ocasión pidió 30 euros para recoger un paquete de Seur, pero le dije que no", relató.

La policía mantiene abiertas las investigaciones para determinar si el detenido actuó de igual manera en algún otro local o establecimiento de la ciudad.

VIVIA EN LA ZONA El hombre era vecino de la zona, aunque en el bar no lo conocían, y se presentó identificándose como inspector de Sanidad y Consumo de la Junta de Extremadura, para lo que mostraba un carnet de color naranja, que resultó ser un carnet con su nombre y su fotografía expedido por la Consejería de Agricultura y Medio Ambiente en el año 2003 con la cualificación profesional de manipulador/aplicador de productos fitosanitarios.

Tras realizar varias inspecciones en el local, incluida la cocina, cobró en concepto de tasas 15 euros, 35 y 30, entregando a cambio a la dueña, a modo de justificante, unos albaranes que él no dudó en firmar. "Los albaranes tenían un número, que supuestamente era su número de colegiado, y un sello falso", según Sandra Panadero, quien cansada de verle aparecer por la puerta de su negocio pidiendo dinero decidió denunciar los hechos en la Jefatura Superior de la Policía Nacional.

El hombre fue detenido por los agentes por un presunto delito de usurpación de funciones públicas, según informó ayer la Policía Nacional, en cuyas bases de datos constan tres detenciones anteriores por otro tipo de delitos. Después de prestar declaración, fue puesto en libertad con cargos, según la policía, que ayer no descartaba la posibilidad de que hubiera actuado de igual forma en otros establecimientos, aunque no se habían recibido más denuncias.