No quiere dar su nombre ni que se le hagan fotos, porque todavía tiene metido el susto en el cuerpo. Pero esta joven de 31 años, que ahora no sabe por qué actuó del modo que lo hizo, reaccionó como una heroína la tarde del viernes, cuando sin encomendarse más que a su instinto de supervivencia, hizo frente a un atracador armado con un gran cuchillo y lo desarmó con un bate de béisbol, que siempre tenía a su lado por consejo de su abuelo.

La responsable del estanco situado en la avenida de Pardaleras estaba sola en el establecimiento hacia las seis de la tarde del viernes. Ella cuenta que los viernes por la tarde suele entrar menos gente, porque no hay actividades escolares y hay menos trasiego en la avenida. Vio entrar a un hombre y ya supo, por su aspecto, que tenía que desconfiar. Le pidió varios cartones de tabaco y una bombona de gas. "Se lo tomó muy filosóficamente", relataba ayer la joven, porque su atracador lo hizo con calma. Nadie más entró en el estanco y cuando le pidió el total de la cuenta, el ladrón rompió el cristal de la puerta del mostrador, con una mochila que contenía un trozo de hormigón.

En este momento el intruso incorporó su cuerpo para abrir la puerta y ella reaccionó dándole una patada para cerrarla. Fue entonces cuando el atracador sacó un cuchillo, posiblemente de cocina, de grandes dimensiones. Ella cogió el bate y empezó a golpearle en la mano hasta que soltó el cuchillo. El bate estaba allí "porque mi abuelo me decía que lo dejara ahí por si alguna vez me hacía falta". Su abuelo falleció hace 3 años y ahora su nieta ha utilizado el bate por primera vez.

Una vez que el atracador soltó el cuchillo empezó a forcejear con la joven, le quitó el bate, quiso golpearla "pero en ese momento, cuando yo veía que estaba perdida, noté que se separaba de mí y vi a un muchacho que lo había cogido".Durante todo el tiempo había estado pidiendo ayuda, y dos chicos acudieron en su auxilio. Estos dos jóvenes redujeron al ladrón hasta que vino la Policía Nacional y lo detuvo. Se trata de T. G. M. de 43 años, que al parecer ya está en la calle, según han informado a su víctima.