La Feria de los Mayores mira al futuro e incorpora contenidos de actualidad, pero también reserva algunos de sus espacios al pasado, como se puede apreciar en las tres exposiciones que ofrece en esta edición.
Una de las exposiciones está dedicada a la indumentaria y complementos del siglo XIX, y en ella se muestra mobiliario y vestuario procedente del Museo Etnográfico de Olivenza.
Otra exhibe distintos carteles turísticos de épocas pasadas, de la colección particular de Cecilio Venegas Fito, y la tercera es de instrumentos y unidades de medida tradicionales en Extremadura, organizada por la Sociedad Extremeña de Educación Matemática Ventura Reyes Prósper.
Esta última reúne las distintas medidas que se empleaban para medir antes de que se implantase el sistema métrico, de las que aún se conservan palabras conocidas por la mayoría de los mayores que visitan la feria, como embozá , que significa puñado que se puede coger con las dos manos, o huebra o güebra que hacen referencia a la extensión que se podía arar con una yunta de una animal en un día. Giro es la cantidad de aceituna que se muele cada vez.
La romana, un medidor de ruedas de carro, una balanza de farmacia, recipientes para medir áridos y granos, o un medidor de madera para coger los bajos de las faldas, son algunas de las piezas expuestas, al cuidado de Matilde Cansado, una voluntaria al cuidado de la exposición, que no sólo vigilaba sino que alababa cada pieza. "Es todo muy bonito, esta exposición me trae muchos recuerdos, unos más alegres y otros más dolorosos, hemos tenido de todo, hay una máquina de servir aceite que es lo más bonito que hay", señaló.
