Las comidas de empresas y de grupos de amigos comienzan a animar el ferial de Caya al mediodía. Mientras algunas casetas ocuparon la mayoría de sus mesas, otras esperan que el número de reservas crezca entre hoy y mañana.

La caseta de mayores y la de la Granja El Cruce, dos de las que habitualmente mayor número de comidas sirven, estaban casi al completo. También en las cinco casetas de peñas y sociedades, que este año se estrenan en Caya, se mostraban satisfechos con el resultado. En otros casos, como en la municipal, que este año lleva el cátering Come y Calla, no llenaron, aunque esperaban que el resto de la semana de feria el público se animase a comer en el real.

Tras la comida, llegaba la hora de las copas. Poco a poco las casetas se fueron animando al ritmo de la música y de la Roja , que fue la protagonista de los bailes y la decoración de un animado público --banderas, gorros y bufandas-- las horas previas al partido de la selección española en el Mundial de Suráfrica.

Sanfermines

Por su parte, el alcalde Miguel Celdrán dijo ayer que, según las opiniones recogidas, "en general la gente ha apreciado que el ferial ha sufrido una transformación muy importante" y mostró a su agradecimiento a las sociedades y empresas que han accedido a hacerse cargo de las nuevas casetas para intentar recuperar la feria de día en el real.

El alcalde popular añadió que si estas casetas funcionan bien, animarán a que en años sucesivos se sumen otras más, al mismo tiempo que avanzó que el ayuntamiento seguirá dignificando el ferial, independientemente de que haya gente que también le guste divertirse en el Casco Antiguo.

Respecto a lo ocurrido la noche del domingo, cuando tres cabestros se escaparon y recorrieron algunas calles del centro, el alcalde le restó importancia y en tono de broma manifestó que por esta anécdota, "la feria del 2010 se recordará como la de los sanfermines de Badajoz".