El Campillo ha resultado ser demasiado extenso para la representación de la historia de la fundación de Badajoz, La osadía de Ibn Marwan . La obra es de Isidro Leyva y ha contado con un invitado de excepción, Fernando Guillén, como guerrero fundador, papel que alabó la concejala de Cultura, Consuelo Rodríguez Píriz. Como también la participación de un numeroso grupo de voluntarios en la obra, que "quizás fue un poco larga", señaló la edil, al preguntarle por qué el público se marchó antes del final. Píriz afirmó que de 1.400 localidades se habían ocupado unas 1.200, pero "quizás al comenzar el espectáculo de los jardines de La Galera antes de concluir la obra, hubo algunos que se marcharon". La representación de anoche se celebró después de algunas dudas, por causa de la lluvia, que hizo pensar en la posibilidad de suspenderla, lo que no ocurrió, al menos hasta el cierre de esta edición.