Los trabajadores del Servicio de Parques y Jardines están fumigando los olmos de la ciudad afectados por una plaga de insectos, llamados galaruca, especialmente en la avenida de Colón, donde los vecinos han dado aviso porque los insectos estaban entrando en las viviendas.

De momento se está fumigando la parte baja de la copa de los árboles, a la espera de que se repare un cañón que lleva el vehículo que se ocupa de estas tareas y que permite la fumigación desde la parte más alta del árbol. "El cañón está en el taller porque está estropeado y en cuanto se arregle se podrá concluir la fumigación", según la concejala de Parques y Jardines, Cristina Suárez Bárcena, quien recordó que la mayoría de las veces se realizan estas tareas por la noche porque apenas hay gente en la vía pública y se causan menos molestias.

Por otra parte, Cristina Suárez Bárcena anunció que en los próximos meses de otoño e invierno se abordará una reforma en el parque de Castelar y el arreglo de la plaza situada junto al colegio Luis de Morales, en la avenida de Colón, para los que hay presupuestados 200.000 euros para el primero y 140.000 para el segundo.

En el caso del parque de Castelar se sustituirá el suelo de albero por otro de tierra, se cambiarán los bancos, se arreglará el estanque y se instalarán juegos infantiles, para lo que se está estudiando el sitio, que "podría ser en la parte del fondo en dirección hacia el hotel Zurbarán", según la concejala.