El Ayuntamiento de Badajoz tiene que instalar los fines de semana aseos portátiles en la piscina de La Granadilla para poder atender la mayor afluencia de usuarios que acuden estos días. El problema viene originado porque con la última gran obra acometida en las instalaciones, se suprimieron servicios para hacer dos adaptados y el aforo quedó limitado por este condicionante, pasando de 800 que tenía antes a 450, de acuerdo con la normativa existente.

Con la colocación de los aseos portátiles, ya pueden entrar más de 600 personas. Se da la circunstancia que tras los trabajos de mejora se ha incrementado el número de usuarios a diario, que es mucho mayor que en temporadas pasadas.

El alcalde de Badajoz, Miguel Celdrán, y el concejal de Deportes, Miguel Rodríguez de la Calle, hablaron ayer de esta situación en el transcurso del acto de inauguración del servicio de Bibliopiscina, que se viene desarrollando año tras año, y que permite a los usuarios leer un libro o la prensa (media hora) mientras están en la piscina, a cambio de una "prenda". El año pasado se produjeron 8.000 préstamos. La Bibliopiscina funciona en horario de mañana y tarde, hasta finales de agosto. Además de lectura, se ofrecen juegos de mesa.