Luciano Escudero Pintado, de 62 años, decidió lanzarse al vacío desde un primer piso al verse acorralado en su dormitorio por las llamas que se habían extendido por el resto de la casa. El hombre ingresó en la UCI del Infanta Cristina con traumatismo de pelvis, quemadura del aparato respiratorio por inhalación de humos y quemaduras de segundo grado, superficiales y profundas sobre todo en las manos y el brazo izquierdo. Ayer se encontraba sedado con ventilación mecánica, su estado era grave y el pronóstico reservado.

El suceso ocurrió sobre las cinco de la madrugada, en el número 16 de la calle Francisco Luján, frente al Pirulí , y causó alarma entre todo el vecindario de la plaza de Santa Marta. Los ocupantes del bloque donde está el piso siniestrado y de los dos contiguos desalojaron los inmuebles durante dos horas, hasta que los bomberos del ayuntamiento controlaron el fuego y ventilaron las viviendas. Según la información del jefe del servicio municipal de bomberos, Fermando Bermejo, el incendio se inició en el salón del piso, aunque las causas no están claras y se baraja desde un aparato eléctrico, a una vela o un cigarrillo.

Luciano Escudero vive solo en el primero B y es prejubilado de banca. Conocido por sus amigos como Puchi , formó parte del grupo Playboys. En su piso, ahora totalmente calcinado, quedan los restos de muchos instrumentos de música. Todo el suelo de la vivienda era de parquet, lo que pudo contribuir a que el fuego se propagase.

Fernando Alcántara, que vive enfrente, fue testigo de lo ocurrido antes de que llegara ningún agente y vio cómo el hombre pedía auxilio sujeto a la ventana de cuclillas, de espaldas a la calle. Desde abajo unos jóvenes le pidieron que se tirase. Cayó en la acera y se dio un golpe con un coche aparcado. La vecina del segundo B, justo encima, Josefa Gordillo, cuenta que sobre las cinco de la mañana "oí un ruido muy grande, como movimiento de muebles, gente corriendo o como si algo estallara". Se asomó por la ventana del dormitorio y el humo ya no la dejó. Fue entonces cuando oyó al vecino pidiendo ayuda. Al lugar acudieron agentes de la Policía Nacional y Local que empezaron a avisar al vecindario para que evacuase los bloques. "Todos se echaron a la calle --explicaba Josefa--, algunos alterados y muy nerviosos". Cuando los bomberos llegaron, el fuego ya estaba muy extendido y salían llamas por las ventanas. Actuaron 8 agentes y 4 camiones, que terminaron sobre las 7.30 horas.

Fernando Alcántara explicó que en la calle había al menos cincuenta personas. El ayudó a tres niños que habían aspirado humo y los llevó a su casa. A otro vecino le dio ropa para que se abrigase, porque muchos bajaron con lo puesto y hacia frío.