El presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, recordó ayer al alcalde de Badajoz, Miguel Celdrán, que hace casi un año le solicitó personalmente --en una reunión que mantuvieron en Mérida-- la cesión de terrenos municipales para construir viviendas baratas. "Si no me los da no voy a estar de brazos cruzados sin hacer viviendas, porque es mi responsabilidad", añadió, en referencia a los terrenos dentro del denominado Plan 60.000 para construir pisos de precio reducido.

El presidente regional explicó que en su día la Junta aprobó una ley que permite declarar de interés social un determinado terreno para convertirlo en urbano, algo que, como reconoció, "pasa por encima de las competencias de los ayuntamientos". Sin embargo, dejó claro que esto no se hace para suplantar las competencias municipales, sino "para suplir la carencia de los ayuntamientos cuando, por las razones que sea, no son capaces de proporcionar suelo".

A su juicio, está claro que "cuando se quiere se puede", y recordó el caso de la riada de Badajoz.