Un total de 227 familias de Badajoz tienen ya aprobada la ayuda para suministros mínimos vitales, que subvenciona la Junta de Extremadura, a través del Instituto Municipal de Servicios Sociales (IMSS), para abonar facturas de electricidad, agua y gas. Otros 106 solicitantes están pendientes de la resolución. Con la suma de todas ellas se agota la cuantía de 230.625 euros que ha recibido el ayuntamiento y ya hay 8 peticiones en lista de espera, que no pueden más que confiar en que algunas de las solicitudes en tramitación sean desfavorables o que las concedidas no agoten toda la cuantía que les corresponde en función de sus ingresos y miembros de la unidad familiar, pues pueden seguir presentando facturas hasta el 15 de diciembre, que es cuando termina el plazo de solicitud.

La concejala de Servicios Sociales, Rosario Gómez de la Peña, explicó ayer que el IMSS informó el pasado 23 de junio a través del Boletín Oficial de la Provincia (BOP) de la situación en que se encuentra este fondo, mediante una resolución con la que resuelve «inadmitir» a trámite desde esa fecha las solicitudes que se presenten para aspirar a estas ayudas, ya que no se puede garantizar que exista crédito disponible, a pesar de lo que se podrán seguir presentando (sin facturas) en el registro del instituto hasta la finalización del plazo de la convocatoria y pasarán a formar parte de una lista de espera que se irá resolviendo por orden de llegada.

El plazo de presentación de solicitudes se abrió el 13 de abril y según la concejala, esperaban recibir más, a pesar de que ya existe lista de espera. De todas las recogidas, en 20 la resolución ha sido desfavorable por superar el límite de ingresos que regula el decreto 202/2016 de 14 de diciembre de la Consejería de Sanidad y Políticas Sociales. Otros 13 solicitantes renunciaron por no poder presentar toda la documentación. Según el número de miembros de las familias y sus ingresos, les corresponden 600, 700 u 800 euros, un crédito que van agotando a medida que presentan las facturas. Si llegado el 15 de diciembre, el beneficiario no hubiese consumido la cuantía concedida, este sobrante se destinaría a los solicitantes en lista de espera.

El pago de la ayuda no se recibe en mano ni en una cuenta corriente, sino que es el ayuntamiento el que abona las facturas a las distintas compañías en nombre de los usuarios con un endoso. Para ahorrar trámites, según explicó la concejala, mediante una aplicación informática el IMSS recaba de oficio todos los datos. Los aspirantes a estas ayudas solo tienen que presentar la solicitud, el libro de familia y la factura a abonar. El ayuntamiento comunica directamente con las empresas suministradoras, a las que envía un correo en el momento que empieza la tramitación para que no se les corte el suministro por impago. Según la concejala, calculaban que les llegarían aún más solicitudes y contó que muchos de los solicitantes de estas ayudas las han pedido sin que todavía tuviesen ningún impago, pues han ido dando prioridad al abono de sus facturas.