Sin previo aviso y sin que se haya producido ningún anuncio por parte del Ayuntamiento de Badajoz ni de la policía local, la avenida Reina Sofía, más conocida como carretera de Circunvalación, amaneció ayer con un nuevo elemento, que no es precisamente mobiliario urbano. Se trata de una cabina para ubicar un radar fijo. La segunda de la ciudad, donde ya funciona además uno móvil. El ayuntamiento no ha confirmado cuándo empezará a funcionar. Solo ha explicado que es la carcasa donde se alternará el cinemómetro que funciona en el puente Real. Según la policía local, puede que se instalen más en otros puntos de la ciudad, que estarán operativas de forma alternativa, como se hace con los fotorrojos.

Esta segunda cabina se ha ubicado en la acera, en plena curva de la carretera, en la margen izquierda en dirección a la Ronda Norte, la más próxima al río. Los vehículos que accedan a esta vía desde San Roque puede que no se percaten de su presencia pues la oculta una palmera. Pero el aparato es inconfundible, ya que a simple vista es idéntico al instalado en el puente Real y también está fabricado con materiales antivandálicos. De momento, el ayuntamiento no ha concretado cuándo empezará a sancionar y se ha limitado a señalar que ha decidido instalar en la ronda de Circunvalación una cabina para alojar un cinemómetro fijo «con motivo de las incidencias observadas por superar la velocidad reglamentaria y los accidentes de tráfico, algunos con resultados muy graves».

El radar fijo del puente Real se colocó a finales de diciembre, también como medida preventiva para reducir la elevada velocidad que se alcanzaba en esta vía, donde ya el verano anterior se eliminó el único paso de peatones por la peligrosidad que representaba. Desde entonces, a expensas de datos contrastados, los conductores se han acostumbrado a levantar el pie del acelerador cuando cruzan este puente, donde son habituales las caravanas de vehículos que no sobrepasan los 50 kilómetros por hora. El radar fijo del puente Real empezó a multar el 11 de febrero y en las primeras 24 horas de prueba captó a 504 vehículos con exceso de velocidad. En concreto, dos superaron los 130 km/h. El ayuntamiento no ha ofrecido datos sobre las sanciones que se han impuesto desde entonces.