El Ministerio del Interior ha acordado con la Delegación del Gobierno reactivar la comisaría de la plaza Alta con el fin de potenciar la seguridad real y la que percibe el ciudadano en el casco histórico de Badajoz. En él, el principal problema en la actualidad, según fuentes policiales contactadas, es la venta y tráfico de estupefacientes, pues en otros aspectos se trata de una zona en "la que apenas se producen actos delictivos; lo dice la estadística".

La forma de potenciar esa comisaría, que lleva funcionando casi ocho años en el bajo de lo que hoy es el edificio de las asociaciones , anexo al Arco del Peso --salvo un periodo de tiempo que estuvo en la calle Encarnación mientras se realizaban obras en este inmueble--, consiste en Trasladar a dicha sede a los miembros del Grupo Operativo de Respuesta (OR), adscrito a la Brigada de Seguridad Ciudadana, según una nota de la Delegación del Gobierno, en la que anuncia la visita de la delegada a dichas instalaciones para mañana.

El GOR tiene como misiones concretas apoyar a los vehículos radiopatrullas en situaciones especialmente conflictivas, persecución de la venta de drogas en los denominados puntos negros de la ciudad, intervención en manifestaciones, concentraciones, eventos deportivos o espectáculos al aire libre.

INTERVENCION INMEDIATA Se trata, pues, de "un grupo eminentemente operativo, de intervención inmediata y eficaz que permite reimpulsar el control de la seguridad ciudadana en los sectores y en las zonas que, de manera puntual, sean necesarios", dice la nota de Interior.

El grupo del GOR que se traslada a la comisaría de la plaza Alta puede estar formado por unos 20 agentes, más de los que hay actualmente, pues son 15 policías que trabajan en tres turnos y con al menos dos vehículos. Este equipo ha logrado, según fuentes conocedoras de su labor, convertir una zona marginal en otra donde es peor la fama que arrastra que la situación real. A ello ha contribuido la desaparición de la prostitución, tanto de las calles aledañas como de la mayor parte que había en la carretera de Circunvalación y "que subían aquí a por droga; ahora hay, pero no es tanta ni relacionada con la droga", según dichas fuentes.

Las actuales dependencias policiales de la plaza Alta se encuentran en el mencionado edificio, que cedió el ayuntamiento y que ha sido remodelado, pues en un principio tenía su acceso desde la propia plaza, y ahora desde la de San José, justo debajo del arco.