Ha estado cien días "mordiéndose la lengua", según él mismo reconoció y ayer el concejal de IU en el Ayuntamiento de Badajoz, Manuel Sosa, compareció para hacer una valoración de lo que ha sido el gobierno del nuevo equipo del PP. En su opinión, lo más característico ha sido "la ausencia del alcalde", Miguel Celdrán y "la acción hiperactiva" del primer teniente de alcalde, José Antonio Monago. Según Sosa, el papel de Monago ha sido criticado por algunos de sus compañeros de grupo, aunque no dio nombres. Sobre la acción de Monago, el concejal de IU dijo sentirse impactado ante la posibilidad de que Badajoz se convierta en un "estado policial".

Asimismo, Sosa criticó que ha habido "chapuzas", como la falta de limpieza o los problemas de tráfico, si bien reconoció alguna excepción, como la reunión que mantuvo la nueva concejala de Educación, María José Solana, con los directores. A este respecto, volvió a pedir la creación del Consejo Escolar Municipal.

Sosa habló también de los proyectos para los terrenos de la antigua Hering y recordó que existe un acuerdo plenario por el cual cualquier decisión debe tomarse por acuerdo de todos los grupos políticos. Sosa reclamó un estudio previo sobre los efectos de un gran centro comercial sobre el pequeño comercio de la ciudad. Dentro de este área, el concejal de IU se refirió al nombramiento de Inocente Mayoral como gerente de Comercio, un cargo que calificó como "el precio de la traición".