Juventudes Socialistas (JJSS) de Badajoz remitió el lunes dos escritos al Defensor del Pueblo, Enrique Múgica, para denunciar que el ayuntamiento "incumple" la Ley de Convivencia y Ocio y también para que estudie si existe "dejación de funciones" en la política de juventud, según anunció ayer su secretario general, Samuel Merino.

La organización argumenta en sus escritos que el consistorio no aplica la parte de la ley antibotellón que corresponde a las administraciones locales porque no controla el consumo de alcohol de menores, como tampoco la apertura de tiendas que se dedican a la venta de botellones en los lugares designados para celebrar este tipo de reuniones juveniles y el horario de éstas. "¿O alguien se cree que a las dos de la mañana estén vendiendo golosinas?", ironizó.

Asimismo, JJSS denuncia en su misiva a Múgica que en las zonas del botellón no existe "la mínima seguridad". Merino expuso que en estos lugares se producen "batallas campales" y carreras ilegales de coches en el Nuevo Vivero ante el "silencio municipal" y apuntó que los jóvenes del PSOE están estudiando los pros y los contras de plantear al ayuntamiento la posibilidad de que se instalen cámaras de seguridad para vigilar estos comportamientos "porque es una situación preocupante y grave", justificó.

Merino además criticó que el ayuntamiento no haya desarrollado alternativas al botellón y que no aplique la Ley de Convivencia y Ocio porque no va acompañada de ninguna dotación económica.

LA REPLICA MUNICIPAL Por su parte, el concejal de Policía Local, José Antonio Monago, replicó que JJSS también debería haberse dirigido a la Delegación del Gobierno, a la que también compete el cumplimiento de la ley. Además, el edil aseguró que en la zona del Nuevo Vivero no se llevan a cabo carreras ilegales de coches, como confirma un informe realizado por la Policía Local de Badajoz.