Ante el cierre de la piscina de verano de La Granadilla los próximos tres meses, Juventudes Socialistas convocó ayer a sus afiliados en la plaza de España para llevar a cabo un acto de protesta por el citado cierre. Equipados con una piscina hinchable y un flotador, una decena de jóvenes mostraban carteles en los que se leía "Sustituta de La Granadilla" o "PP=Piscinas Privadas".
El grupo, que repartía pasquines informativos explicaba que este acto era una "protesta en contra de la ineficiencia por parte del ayuntamiento". Rechazaban el perdón del alcalde que, en su opinión, se olvida de que esta obra ha sido incluida en los presupuestos municipales año tras año.
Las Nuevas Generaciones del Partido Popular calificaban esta concentración como el primer acto de un "particular verano político", que prevén que estará plagado de "ocurrencias y distracciones para opacar el debate real, que es el de las soluciones para la crisis".
