La vecindad de Llera no ceja en la actitud de denuncia por la situación en que se encuentra la barriada, y ha recabado el apoyo del grupo municipal socialista para hacer llegar al equipo de gobierno del ayuntamiento los problemas que padecen, como consecuencia del "abandono a que se encuentra sometido el barrio", según manifestó ayer la concejala Rosario Ibán, quien apoyó sus críticas y demandas con una visita al barrio.
Ibán señaló la dejadez de las zonas verdes, casi todas echadas a perder, excepto una pequeña "que riega un vecino". Señaló la suciedad que padece todo el barrio, "lleno de hierbajos y pastos", estado que convierte en impracticable el campo de fútbol y las instalaciones deportivas con que cuentan, y que se hace extensivo a los solares, "muchos sin vallar", convirtiéndose en "focos de ratas, insectos y todo tipo de bichería" propia de esta estación del año.
La concejala alertó de la existencia de estacas en el paseo de la carretera de Olivenza en la margen derecha, que están al aire tras haberse quemado unas vallas de madera; la presencia de muebles abandonados en varios lugares, pero sobre todo en la calle Avellano, "convertida en estercolero" y por la que "debería pasar de vez en cuando el servicio de recogida de muebles viejos". Esta situación, dijo Rosario Ibán, "sólo se ve en la periferia". Los vecinos se quejan del paso de vehículos a un vertedero "que es legal" y en la ausencia de la policía local.
