«Los clásicos, que reconocemos como la base de nuestra cultura en todos los ámbitos, descubrieron la democracia, vieron surgir la demagogia y acabaron por alertar del riesgo de la dictadura de los demagogos para la democracia», manifestaba ayer Marcos Chicot, autor de Asesinato de Sócrates, la novela que quedó finalista en el último Premio Planeta.

Chicot, autor también Asesinato de Pitágoras, estudioso del mundo clásico y psicólogo clínico de profesión, además de escritor, consideró en declaraciones antes de la presentación y firma de su libro, que el paralelismo entre la decadencia de Grecia y la actualidad es palpable, «parece que no hemos aprendido», dijo. No obstante, considera que «la solución está en cada uno de nosotros. Pitágoras dijo que la ignorancia es lo que mantiene al tirano».

Chicot presentó ayer su novela en la Feria del Libro de Badajoz, que también contempló la presentación por la Fundación de Estudios Libertarios Anselmo Lorenzo de Cervantes Literario, de Emilio Sola; la de La hija del taxkurra, de José Alfonso Romero; Espérame en la última página, de Sofía Rhei; y en la librería Tusitala, El ciclo del amor marica, de Gabriel J. Martín, actividad incluida como parte del programa de la Fiesta de la Diversidad Los Palomos.