El mundo de la empresa pacense y extremeña se dio cita anoche convocado por La Crónica de Badajoz, en la gala de entrega de los VII Premios Empresario del Año de Badajoz 2017, que tuvo lugar ante 400 invitados en el Edificio Badajoz Siglo XXI, con asistencia del presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara; el alcalde de la ciudad, Francisco Javier Fragoso; la delegada del Gobierno, Cristina Herrera; el expresidente José Antonio Monago; el diputado provincial Manuel Borrego, entre otras autoridades, quienes fueron recibidos por el director de este diario, Antonio Cid de Rivera.

Organizados por La Crónica de Badajoz y patrocinados por Ibercaja y Teléfonica, con sus directores territoriales presentes, Guadalupe Guerrero y Guillermo Santamaría, respectivamente, los Premios Empresarios de Badajoz culminaron con el reconocimiento a Manuel López Pocero, impulsor con su esposa, Isabel Bolaños, de un grupo industrial con empresas como Cristales y Persianas López, Alumasa y Expalum, entre otras firmas de prestigio, que trabajan en 50 países. Manuel López recibió el Premio Empresario del Badajoz 2017, que recogió de manos del presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara.

Otro gran premio, el Especial de La Crónica de Badajoz, lo entregó su director, Antonio Cid de Rivera, a Magdalena Moriche, presidenta de la fundación que lleva su nombre y creadora de la Asociación de Padres por la Integración de Personas con Inteligencia Límite y Discapacidad Intelectual Ligera, Aexpainba, por la labor que desempeñan, cuando se disponen a celebrar su veinte aniversario. Para Magdalena Moriche, este premio significa «un orgullo» y «un refuerzo a nuestra lucha», que no es otra que dar «visibilidad» a las personas con inteligencia límite, un colectivo que aún es «invisible en la sociedad» por no estar integrado en el colectivo de la discapacidad ni en el de la normalidad.

En la gala, presentada por el humorista David Guapo, se entregaron los premios al resto de galardonados. A Señorío de Montanera, la industria cárnica que más jamones y paletas saca al mercado bajo el marchamo de la Denominación de Origen Dehesa de Extremadura, recibió el de Trayectoria Empresarial. Lo hizo su gerente, Francisco Espárrago, y lo entregó el alcalde de Badajoz, Francisco Javier Fragoso.

También se entregó a Vianóleo, especializada en la comercialización del aceite de oliva virgen extra, en reconocimiento a su innovación al incorporar licopeno a sus productos. Recibió el Premio Pyme, que recogieron los hermanos Antonio y Víctor López Mediero, de manos de la delegada del Giobierno, Cristina Herrera.

El Premio al Autónomo reconoció a los arquitectos Daniel Jiménez y Jaime Olivera, que dirigen un estudio de arquitectura en Badajoz, del que han salido proyectos que han hecho de Extremadura en un referente nacional. Se lo entregó el consejero de Fomento, José Luis Navarro.

Otro de los econocimientos que más expectación levanta es el de Mujer Emprendedora, que fue para María Engo, quien con su colección Alepo ganó el certamen de Jóvenes Diseñadores de Extremadura y representó a la región en los Premios Nacionales de Moda. Lo entregó la directora territorial de Ibercaja, Guadalupe Guerrero.

INTERVENCIONES / El alcalde, Francisco Javier Fragoso, agradeció «a La Crónica de Badajoz que mantenga estos premios y destacar la figura del empresario. Somos tierra de empresas y me satisface más que se haga en Badajoz, algo fundamental para mi ciudad».

Fragoso afirmó que «a veces se dice que no tenemos empresarios, pero yo presido los premios desde el principio y veo que hay un importante elenco, que al jurado le resulta difícil elegir». Y destacó la figura que «ha sido poco reconocida por la ciudad», dijo, para felicitar a todos los premiados y destacar sus valores.

El presidente afirmó que «cada año vemos cómo no se cumplen las previsiones de los analistas; las previsiones las hacen realidad los empresarios» que crean riqueza y empleo. Dijo que en la región «tenemos muchos proyctos energéticos, de tecnologías, de conocimiento que son de extremeños emprendedores».

Destacó el presidente «el talento, la pasión, la valentía y el trabajo» de los premiados y se comprometió «a que un día Extremadura pueda dejar de recibir ayudas y de ser receptora de fondos, pero mientras, tenemos que luchar y exigir lo que nos corresponde, porque en igualdad de condiciones, podemos competir con los demás».

Antonio Cid recordó que esta cita pretende homenajear a los artífices de la creación de riqueza y de empleo en la provincia, tanto a los que tienen experiencia como a los que empiezan, porque «hay cantera». A todos ellos los definió como «héroes con muchas ganas de trabajar, trabajar y trabajar».

Valoró la importancia de los empresarios en un medio de comunicación gratuito, como La Crónica de Badajoz, que depende de la publicidad y que como los demás medios debe estar al lado del empresario y comprometerse con sus problemas y reivindicaciones, como también están los empresarios extremeños detrás de la pancarta cuando la comunidad reclama un transporte de calidad. La Crónica de Badajoz -recordó- cumple 11 años y en este tiempo ha «cambiado el concepto de la prensa gratuita» pues no es un periódico que rellene los espacios que deja libre la publicidad sino que cuenta lo que ocurre «aquí al lado» «En La Crónica no somos de dar lecciones de verdad, hacemos periodismo, independiente, de calidad y de calle».