Dicen quienes estudiaron en el colegio de los Maristas que esta época de formación imprime carácter, no sólo desde el punto de vista académico sino de desarrollo personal y tan marcados quedan quienes pasan por este centro que cuando forman su familia intentan que sus hijos sigan su estela.

La huella que en los escolares dejaron aquellos años se rememora en los encuentros que, desde hace cinco años, la Asociación de Antiguos Alumnos del Colegio Marista Nuestra Señor del Carmen, de Badajoz, organiza en homenaje de las promociones que cumplen sus bodas de oro y plata. Esta asociación es la más antigua de la ciudad, pues lleva más de 80 años funcionando. Tras un periodo casi inactiva, la nueva directiva la ha retomado para ofrecer actividades lúdicas y deportivas que enganchen a antiguos alumnos de todas las promociones, incluidas las antiguas, de aquellos que empezaron en la calle Donoso Cortés y vieron cómo se construyó el edificio de la autopista.

Ayer se celebró en el colegio el homenaje dedicado a las promociones de 1964 y 1989, al que acudieron un centenar de convocados. El secretario de la asociación y organizador de este encuentro, Carlos Batalla, confirmaba que esta experiencia marca. De hecho, en la reunión de ayer había estudiantes que solo estuvieron un curso.

Esta vinculación existe "porque así nos la inculcaron y también hay que entender que los años de escolares y de estudiantes te marcan mucho, son años de muchas vivencias y volver después de tanto tiempo a las mismas clases, a ver a los profesores y a los compañeros, supone un recuerdo común y conectamos enseguida, parece que fue ayer y que estamos todos en pantalones cortos dispuestos a pasarlo bien".

A pesar del tiempo transcurrido, se reconocen físicamente y "enseguida conectamos, porque ése es el espíritu Marista, que intentamos nosotros revitalizar aquí". También es cierto que este centro posibilita la permanencia desde preescolar hasta bachillerato y la vinculación entre sus alumnos es mayor. "Son muchas viviendas las que compartimos", señala Batalla. Localizarse no está siendo difícil a través de las nuevas tecnologías.

Este antiguo alumno, que celebraba sus bodas de plata, apuntaba que las instalaciones del colegio apenas han cambiado, y tampoco el sistema educativo. Como padre de alumnos así lo ha comprobado.