La Policía Local de Badajoz no tenía ayer aún fecha prevista para la reapertura del nuevo cruce habilitado en la BA-20 con Antonio Cuéllar, cerrado desde la tarde del sábado tras dos accidentes de tráfico. La decisión estaba pendiente de que se adopten algunas medidas más que refuercen la seguridad de la intersección, además de las que ya se acometieron el lunes y de las que informó este diario, consistentes en pintar líneas de dirección, los pasos de cebra, colocar bandas reductoras y reajustar los semáforos. Parece que no son suficientes.

El superintendente de la Policía Local de Badajoz, Rubén Muñoz, revisó ayer por la mañana el cruce a pie de calle para localizar posibles fallos. Una actuación fundamental será sincronizar este cruce semafórico con los reguladores del anterior y el posterior que existen en la autopista, para evitar que un coche que acaba de arrancar y acelerar tenga que volver a detenerse a los pocos metros. Asimismo, se ha comprobado que hay farolas que pueden incidir en la visualización del semáforo. Uno de los postes se va a desplazar para que no coincida con la línea óptica de la primera farola. Por otro lado, la parte colgante del semáforo se va a alargar más de lo que está. También falta la señalización de prohibición de giro a la derecha y líneas de detección. Por último, se van a recortar los arbustos y eliminar los jaramagos para abrir el campo de visión. La policía local descartó ayer que el cruce pudiera reabrise a lo largo del día. Se hará cuando se ultimen todas estas actuaciones. a. M. R