El río Guadiana fue ayer escenario de una exhibición de vuelos protagonizada por aviones dirigidos por radiocontrol que llegaron de varias ciudades de España y Portugal para participar en el V Encuentro Hispano-Portugués de Hidroaviones Radiocontrolados que se celebró en el azud del río, organizado por el Club Pacense de Aeoromodelismo.
Los pacenses acudieron a este encuentro, uno de los tres que se celebra en España junto con el de Ciudad Real y Galicia, pese a las altas temperaturas que se registraron ayer en la capital pacense. Resguardados de los rayos del sol con sombrillas, paraguas y gorras, el público aguantó el calor para observar las piruetas del medio centenar de aeronaves dirigidas por 37 pilotos procedentes de Seixal, Coimbra, Lisboa, Madrid, Córdoba, Ciudad Real, Toledo, y otros puntos de la comunidad extremeña.
Aunque los participantes eran pilotos experimentados, uno de ellos perdió el control y su helicóptero fue a estrellarse al agua, por lo que tuvo que ser rescatado. Sobrevolaron el Guadiana distintos modelos de aviones, los más pequeños de un metro y medio y los más grandes, como el de uno de los equipos portugueses, medía hasta tres metros y medio.
Muchos aeromodelistas prefieren diseñar su propio avión, construirlo y ensamblando poco a poco para luego hacerlo volar, pero la mayoría de los participantes llevaban aparatos adquiridos en tiendas, prácticamente montados, según el presidente del Club de Aeromodelismo de Badajoz, Juan Francisco de Sixte. La falta de tiempo y la amplia oferta de modelos que hay en el mercado, ha hecho que cada vez sean más las personas que compran el equipo, "por 200 euros viene el equipo completo".
Pilotar no es una tarea difícil, según manifestó, "pero sí precisa de la ayuda y el asesoramiento de gente experimentada, porque si no el avión dura dos horas".
