El empresario de Jardines del Guadiana y de Golf Guadiana, Angel Medrano, mostró ayer, igual que hizo el día antes el que fue su socio Rafael Alvarez-Buiza, una gran desconfianza hacia la Fiscalía Anticorrupción, que le imputa a ambos, junto con los dos funcionarios, por el caso del Canal y del Golf Guadiana.

Medrano y Buiza acaban de salir de una cruzada de diez años con la misma fiscalía por el famoso caso de Telecinco, "por el que nos pidieron 12.000 millones de pesetas y prisión incondicional por alterar el accionariado de Telecinco, y después de tanto la sentencia dijo que no hubo nada y nos absolvieron". Por eso considera que este caso del Canal "es algo parecido a un mini Telecinco, al final quedará en nada", aunque piensa que "esta vez será rapidísimo".

Por ello no escatima en críticas hacia Anticorrupción, a cuyo fiscal califica de "comisario político". En su opinión, "está totalmente politizada, se demostró en el caso de Telecinco y en otros".

Medrano aseguró que ante esta nueva querella "no estoy preocupado, estoy cansado". Sobre el asunto del Canal aseguró que "no puede haber estafa si no hay estafado" e insistió en que "el Canal no es ni ha sido del ayuntamiento, es una servidumbre de acueducto, no es una propiedad".

El abogado de Medrano y Alvarez Buiza, el letrado Luis Díaz Ambrona, considera que la querella presentada por Anticorrupción "en el fondo no lo es, recoge una serie de datos totalmente manipulados por la propia fiscalía". Además criticó que impute a dos técnicos "que han cumplido su función con gran meticulosidad".

Díaz Ambrona acusó a la fiscalía de "falta de profesionalidad" y aseguró que en Golf Guadiana se actuó con transparencia "y todo fue consentido por las administraciones que tenían que intervenir: la Junta y el ayuntamiento".