El menor que fue víctima de abusos sexuales entre agosto de 2013 y agosto de 2015 en un domicilio en Badajoz, afirmó ayer durante su declaración en el juicio por este caso que no conocía al único acusado que se sienta en el banquillo, mientras que dio las señas «de un portugués bajito» que se corresponden con el otro inculpado, declarado en rebeldía y como tal se le juzga, según manifestó el letrado de la defensa José María García Morán.

En el juicio, iniciado ayer y que continuará hoy, a puerta cerrada, declaró también el padre del menor y esta mañana lo harán los peritos, así como se presentarán los informes definitivos de cada una de las partes.

La vista oral por un delito continuado de abusados sexuales sobre un menor, que tenía 13 años cuando ocurrieron los hechos y padece un déficit mental moderado, según el relato de los hechos del Ministerio público, comenzó ayer después de varias suspensiones anteriores, al menos tres, por incomparecencia de uno de los dos acusados, el mismo que tampoco acudió ayer a la cita judicial en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Badajoz, por estar en paradero desconocido, y a quien se juzga en rebeldía.

El fiscal solicita en sus conclusiones provisionales una condena para los dos acusados, que conlleva una pena de cinco años de prisión, la prohibición de acercarse los autores del delito a la víctima, al lugar de estudio, domicilio y alrededores, a menos de 300 metros durante seis años, también la prohibición de comunicarse con el menor por cualquier medio por el mismo periodo de tiempo, así como otros cinco años de libertad vigilada, además de solicitar que se les impongan el pago de 12.000 euros en concepto de indemnización a la víctima.

LA DEFENSA, ABSOLUCIÓN / La defensa, por su parte, según el letrado José María García Morán que representa al acusado que sí está presente en el juicio --pues el inculpado a quien se juzga en rebeldía no está representado por ningún abogado--, solicitará al tribunal la libre absolución de su patrocinado, con todos los pronunciantes a su favor, sobre la base de «la inexistencia de autoría del delito».