Una mujer de 78 años murió ayer en el supermercado de la cadena El Arbol, situado en la avenida Ricardo Carapeto, de la barriada de San Roque, al sufrir una parada cardiorespiratoria.
El suceso ocurrió sobre las once de la mañana cuando B. B. T., vecina de esta barriada, se encontraba esperando su turno en la pescadería del citado supermercado. La mujer se sentó en un banco colocado en esta sección "y sin decir nada emitió un ruido, como un ronquido, y murió en el acto", según explicaron testigos presenciales.
El personal del establecimiento avisó a los servicios del 112, que se personaron en el lugar de inmediato, intentando reanimarla sin poder hacer nada por salvar la vida de la mujer, que permaneció muerta en el establecimiento hasta que una hora y media después el juez ordenó el levantamiento del cadáver. Fue trasladado a necropsias del Hospital Infanta Cristina, ya que los familiares desistieron de que se le practicara la autopsia al tratarse de una muerte natural.
MOMENTOS DE TENSION En el interior del local, tanto el personal como los clientes presentes, vivieron momentos de tensión y nerviosismo. Uno de los empleados fue el encargado de comunicar personalmente en el domicilio de la mujer la muerte de ésta a sus familiares.
Según los vecinos, la finada, que vivía en una calle próxima al supermercado, no se encontraba enferma. "Tenía algunos achaques de la edad, pero no se había quejado de nada en particular. Salió como todas las mañanas a hacer la compran y no volvió a su casa", señalaron consternados.
El establecimiento, que permaneció cerrado durante algo más de hora y media, volvió a reanudar su actividad una vez fue retirado el cadáver.
