El fuego llevó ayer la tragedia a una familia, que perdió a uno de sus miembros y tiene a otro herido, intoxicado por inhalación de humos debido a un incendio que se originó pasadas las nueve de la mañana en un chalet de la urbanización Club Olímpico Ibérico, cerca del kilómetro 72 de la EX-100 de Badajoz a Cáceres.

El fallecido es Daniel P., de 68 años, que se hallaba en la casa donde vivía con su esposa M. D. O., de la misma edad, quien resultó con una crisis nerviosa. Su hija, R. M. P. D., de 38, y R. S. M., de 37, esposo de ésta, con sus tres hijos de 17, 10 y 6 años se encontraban en la vivienda cuando ocurrió el siniestro. La mujer joven resultó afectada por el humo, pero de forma leve, mientras que su hijo mayor, D. S. P., está herido de gravedad, aunque pudo ser rescatado con vida del interior, tras caer inconsciente, por los bomberos y miembros de Cruz Roja. La abuela y los niños salieron ilesos.

La situación fue dramática. Dos vecinos acudieron enseguida al percatarse de la situación y con una radial y una sierra normal cortaron la reja de una ventana por la que salieron la pareja joven y uno de los niños. Al abuelo no pudieron ayudarle.

La causa del fuego, según testimonios de los vecinos, estuvo en una estufa, o un brasero, del salón, aunque oficialmente no se confirmó y se está pendiente del informe de la Guardia Civil. Los bomberos confirmaron que "toda la carga térmica se hallaba en el nucleo de la vivienda".

LA LLAMADA AL 112 El 112 recibió la llamada a las 9.28 de la mañana y movilizó a los bomberos, al SES y a la Cruz Roja, al tiempo que actuaban la Guardia Civil y al centro de salud de San Fernando, de guardia.

El jefe del servicio de bomberos encontró a la abuela y una niña fuera de la casa y a cuatro personas dentro. Dos vecinos, un empleado del club, Santiago Vázquez, y el otro un policía retirado, Pedro Nolasco, cortaban con una radial y una sierra la reja de una ventana por la que pudo saltar la pareja joven y un niño.

El chico mayor cayó inconsciente pero fue rescatado con vida por los bomberos y la Cruz Roja y luego trasladado al Infanta Cristina. Quien no pudo salir fue el abuelo, que pedía que le sacaran de la casa porque ya tenía quemaduras en un brazo.

Los bomberos entraron "cuando pudimos abrir brecha hasta el otro extremo de la casa, el más afectado y donde estaba el hombre mayor", pero no pudo salir vida relataron ayer. Las ambulancias trasladaron al Infanta Cristina a los heridos y los agentes de la Guardia Civil esperaron la llegada del juez de guardia y el forense para proceder al levantamiento del cadáver.