Dejar en la calle las heces de perros u otros animales puede costar caro a sus dueños, ya que el nuevo reglamento de Limpieza Urbana aprobado ayer por el pleno lo considera una infracción grave que está penalizada con multas que oscilan desde los 751 hasta los 1.000 euros.

A partir de ahora habrá que recoger los excrementos de las mascotas con bolsas impermeables, perfectamente cerradas, y depositarlas en los lugares indicados.

De igual forma se castigará a aquellos que realicen inscripciones o pintadas, usen indebidamente contenedores, bancos o papeleras y abandonen muebles, enseres o animales muertos en espacios públicos. También se considera falta grave cambiar el aceite u otros líquidos a los vehículos en la calle.

Otro de los incumplimientos por el que se sancionará a vecinos y comunidades con multas desde 15 hasta 200 euros se refiere al horario para sacar las bolsas de basura, que sólo podrá ser de las nueve a las once de la noche. La mezcla de diferentes categorías de residuos será penalizada también si produce un daño o deterioro grave para el medio ambiente o se haya puesto en peligro grave la salud de las personas.

Algunas de estas infracciones vienen recogidas en el nuevo reglamento, que sustituye a la ordenanza de 1993, y que por primera vez recoge la clasificación de los residuos (orgánicos, papel, vidrio, plástico y aceite), los colores de los contenedores, los horarios de recogida e incluso el uso del mobiliario urbano y de los juegos infantiles, estos últimos no se podrá utilizar por niños de edades superiores a las indicadas.

La policía local velará por el cumplimiento del reglamento, que se publicará en el Boletín de la Provincia y entrará en vigor 20 día después de su publicación.

En el pleno de ayer se aprobó el cambio de gestión del Servicio de Limpieza Urbana, Recogida Selectiva Domiciliaria y Eliminación de Residuos Sólidos con los votos favorables del PP, en contra de IU y la abstención del PSOE, y se dio luz verde a la privatización de la Limpieza, con la aprobación, sólo por el PP, de los pliegos de condiciones para la contratación mediante concesión administrativa.

EL DEBATE Los grupos de la oposición responsabilizaron del "fracaso" del modelo actual de limpieza "a la pésima gestión del del PP", que ha dejado que el servicio se vaya deteriorando, según señalaron. Tanto PSOE como IU tacharon al equipo de gobierno de "oportunista" por privatizar el servicio un año antes de las elecciones y retrasar la revisión de los precios hasta mayo del 2012.

El portavoz socialista, Celestino Vegas, manifestó que "el PP debe pedir perdón a los ciudadanos por vivir diez años en la ciudad más sucia de España", mientras que el de IU, Manuel Sosa, pidió el cese de Antonio Avila como concejal de Limpieza.

Vegas se quejó de que "no hay voluntad de transparencia" en el pliego de condiciones, donde "ni siquiera la memoria es un documento contractual". Por ello, criticó que no se recoja la frecuencia de la recogida de basura ni se defina el servicio que la adjudicataria tiene que prestar.

Además, insistió que el coste de la privatización es superior al que dice el PP y preguntó quién pagará el canon al vertedero o los 20.000 metros cúbicos de agua para limpiar las calles. Según afirmó, con los pliegos actuales "no se adjudica al mejor postor, sino a aquel que ya está decidido". Según recordó, el PSOE defendía un modelo de gestión mixto, pero "la diferencia entre el PSOE y el PP es que nosotros queremos una ciudad limpia, pero no a cualquier precio".

Por su parte, el portavoz de IU, Manuel Sosa, explicó que su modelo ideológico le impide apoyar cualquier privatización y recordó al PP que "el fracaso en los público no justifica lo privado, sólo hay que cambiar a los responsables de la gestión".

Sosa culpó al PP de dejar sin empleo a las 370 personas de la bolsa de trabajo que limpiaban las calles, "en una año de crisis".

DIA HISTORICO El portavoz del PP, Francisco Javier Fragoso, que calificó la jornada de ayer de "histórica", aclaró que "no ha fracasado ni la gestión ni el concejal, sino el modelo público", por ello defendió un nuevo modelo "moderno, eficaz y eficiente, mecanizado y automatizado", a la altura de otras capitales españolas.

Insistió en la transparencia y en que "la memoria contempla unos servicios mínimos y a partir de ahí hay que mejorar". Según dijo, ésta es "un documento contractual porque las ofertas tienen que cumplir como mínimo la memoria", que se incorpora al contrato.

Fragoso recordó que la bolsa de empleo seguirá existiendo para el resto de puestos.