La coordinadora, María Luisa Alpuente, sólo tiene palabras de aliento, admiración y reconocimiento hacia las mujeres que participaron o siguen en el proyecto de Equipo Solidaridad. "Son mujeres valientes, luchadoras, fuertes, honradas, con vidas difíciles pero que no se dejan vencer por el desaliento", dice de ellas. La esperanza de que sus vidas pueden cambiar las anima a seguir "y muy pocas se quedan en el camino".

Son mujeres que además conviven y que se ayudan entre sí. Las alumnas de esta escuela pueden incorporarse a los talleres en cualquier momento, "y eso para ellas es fundamental", porque muchas encuentran trabajo temporalmente, se marchan pero saben que pueden volver. De hecho, hay beneficiarias que solo pueden acudir alguna tarde, pero no lo dejan "porque dicen que aquí recargan las pilas", señala.