La Concejalía de Urbanismo ha dado los primeros pasos para desarrollar urbanísticamente una nueva zona industrial ubicada en la carretera de Campomayor, con la que se ampliará el polígono industrial de El Nevero.

Para ello se ha puesto en contacto con otros propietarios, concretamente con la familia Bas Mirón, que posee terrenos en esta zona, para llevar a cabo un plan parcial. "La Inmobiliaria Municipal ha iniciado las conversaciones con ellos y están dispuestos a que lo desarrollemos conjuntamente", según confirmó el concejal de Urbanismo, Celestino Rodolfo.

Es una zona próxima a las Cuestas de Orinaza donde el ayuntamiento posee 110 hectáreas de suelo industrial urbanizable, que se encuentra entre el actual centro de menores Marcelo Nessi y las parcelas donde se ubicará Leroy Merlin, según el concejal, quien aseguró que se iniciará la urbanización "en la parte más próxima a la carretera de Campomayor".

Se hará un plan parcial y se harán parcelas para venderlas a industrias escaparates, que son aquellas que se sitúan a lo largo de las principales vías de comunicación y configuran fachadas urbanas. Estas industrias escaparates suelen acoger actividades industriales limpias, de alta tecnología, talleres y locales de exposición y venta, así como oficinas y servicios ligados o no a la propia demanda industrial.

La Inmobiliaria Municipal desarrollará y gestionará ese suelo, según Celestino Rodolfo, quien explicó que aún está por decidir si las parcelas resultantes se venden solo con el suelo o si la propia inmobiliaria edifica las naves y las vende ya edificadas.

Con esta actuación se ampliaría el polígono industrial y se cerraría con esa zona industrias que mirarían hacia la carretera de Campomayor, conformando así una avenida "que va a tener una gran importancia cuando la Plataforma Logística se desarrolle porque tendrá mucho tránsito y cambiará su aspecto, ya que toda la gente que se dirija hacia la plataforma, que tendrá la entrada por esta carretera, pasará por ella".

LA ESCOMBRERA Otra de las cuestiones que se está planteando el equipo de gobierno es la idoneidad de sacar la escombrera y la futura planta de residuos sólidos inertes de las Cuestas de Orinaza o dejarla donde está. "Estamos estudiando si se saca de ahí en qué condiciones quedaría, porque el problema es que no está todo colmatado y habría que compactarlo para evitar un movimiento de tierra, si no habría que dejarlo durante 15 o 20 años hasta que se colmate".