No hay acuerdo, de momento, para la reubicación de los puestos en el mercadillo de los martes, aunque sí el compromiso del ayuntamiento de asfaltar todo el espacio que ocupan una vez que haya una decisión definitiva sobre la colocación de todos los vendedores.

El concejal de Mercados, Alberto Astorga, se reunió ayer con un grupo de vendedores. Al ayuntamiento acudieron una treintena, pero solo varios entraron a la reunión. Volvieron a salir para discutir las posibles soluciones y, de regreso, mostraron su desacuerdo con la propuesta del concejal.

El problema tiene su origen en que tras la concesión de licencias, han entrado siete más que habían recurrido y además había que reubicar a los puestos de fruta y verduras. El concejal propuso un nuevo recorrido, con una sola calle, pero suprimiendo la lengüeta de la fruta y organizando los puestos del principio en forma de S. Además, pretende separar los puestos situados junto al talud del puente Real por cuestiones de seguridad. Según Astorga, en un primer momento los vendedores aceptaron la idea, pero posteriormente la rechazaron y entonces el concejal les ha pedido que sean ellos los que presenten un plano que ocupe el mismo espacio y, cuando se acate, se compromete a asfaltar toda la superficie.

En nombre de los vendedores, Antonio Salazar señaló que ellos quieren hacer sitio a las nuevas licencias sin modificar la actual organización. Su propuesta es poner una calle en medio donde están los de las verduras para estos puestos nuevos. Pero lo que más le urge al colectivo es que asfalten todo el espacio tal y como ha prometido el concejal.